8.10.10

QUIMÉRICA SUBSISTENCIA


¡Y yo que me creía, iluso, que la mayor exposición de la población a las descargas gratuitas iba a generar un mayor interés por la música en directo! ¡Que los conciertos serían la forma de subsistencia de los artistas en tiempos en los que es una quimera vender discos! Se hablaba de una mayor asistencia a las actuaciones pero me da que se produce en macroeventos como festivales o ese concierto que, cada año, la modernez instaura como el espectáculo que uno no se puede perder. Esta temporada es Arcade Fire. Otras ha sido Rufus Wainwright o Tom Waits. Ya saben, poder decir aquello de “yo estuve allí”, dejando de lado consideraciones estrictamente musicales.

Pues bien, volviendo a la música, que es lo que me importa, ayer actúo Nina Nastasia ante una Sala Apolo reconvertida en una especie de music-hall, con sus mesitas y velas. Sin duda es una de las mejores formas imaginables para disfrutar de la límpida voz de la cantante y compositora. Pero no parece económicamente viable. Y me dio mucha pena. Porque era un precio más que popular —15 euros en taquilla; anticipada, 12—, porque el concierto alcanzó cimas inmensas de intensidad y emoción (en parte, gracias a ese violinista que la acompañaba y que es un regalo de los dioses). Porque será uno de los conciertos que seguro que atesoraré como inolvidable.

Al acabar el concierto me acerqué a la mesa de merchandising y compré su último disco (en vinilo, claro). Era lo mínimo que podía hacer. Aparte de quejarme, claro.

Buen fin de semana.

1 comment:

Estanis Solsona said...

el concierto del año, en mi humilde opinión. cuando aceptó mi petición de que tocara 'treehouse song' me sentí como un niño de seis años de contento, además de manera tan espontánea. yo tampoco entiendo que no hubiera más público, pero por lo único que me preocupa eso es porque tarde otros seis años en volver.

un saludo