Y se fue en Amsterdam, camino de un concierto. Y nos abandonó para reunirse con su creador, para encontrar esa paz y felicidad que quería transmitir en sus actuaciones. Y nos dejó un poco más tristes, un poco más solos. Hace apenas tres meses iluminó una noche en Barcelona, en la Sala Apolo, y nos ofreció un concierto que aunaba sentido del espectáculo con calidad musical. Un auténtico padrino del soul, el gran Solomon.
No volveremos a escuchar en directo su poderosa y templada voz. No volveremos a recibir esa mirada de tierna comprensión por sus semejantes, ese brillo en sus ojos, esa contagiosa calidez humana.
Descansa en paz, Solomon. Nos has dado mucho más de lo que quizás llegases a imaginar. Y lo sigues haciendo cada vez que nos cantas desde una de tus grabaciones.
Descansa en paz, Solomon.
3 comments:
Descansa en paz, Solomon.
Incís. Enhorabona per l'article "Democratització, no. Dictadura" al bloc de la comissió de periodistes gràfics. Molt ben exposada aquesta incòmoda veritat. Una abraçada.
Moltes gràcies, Tomás.
Si vols aprofundir sobre la imatge que es té de nosaltres, per part de gent aparentment informada, no et perdis això:
http://www.elenacabrera.com/weblog/los-fotografos-de-conciertos/
Que sigui lleu!
Vaya, Oscar, la primera vez que entro en tu blog y me das el día...
No me había enterado de lo de Solomon, una verdadera pérdida.
Por lo poco que he podido ver compartimos amor por la fotografía y por en R'n'R, así que ya pasaré más tranquilo a visitarte. Un saludo.
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