15.4.09

MEDIOCRIDAD


Hoy volveré a la película “Control” —fui de nuevo al cine y ya tengo en mis manos el DVD gracias a Amazon UK—, pero no para comentar sus bondades, que son muchas y variadas, sino para utilizarla como punto de partida de una reflexión.

Vivimos vidas mediocres, anónimas. Alguno de nosotros quizás convierte su afición en pasión y ésta, en un golpe de suerte u oportunidad, le arrastra a la luz pública. La celebridad conlleva la admiración, y la extracción de la gris masa pública al podio de los elegidos. El problema es que no estamos preparados para presidir ese podio. Ian Curtis, con una vida de lo más gris —matrimonio prematuro, trabajo en la oficina de empleo de una triste ciudad de provincias— empieza a ser una celebridad gracias a su liderazgo de Joy Division. Pero sigue siendo un joven desorientado que se mueve por inercia.

Cuando alguien se galvaniza ante la luz de los focos, nada es lo mismo. Nosotros no le tratamos igual. Aparece la idolatría, la contemplación absorta, la imitación. Queremos creer que es el elegido, que todo lo que hace tiene un hálito especial que lo diferencia de nosotros. Y él, objeto de nuestra admiración, tiene por fuerza que sufrir una enorme disociación entre lo que conoce de si mismo —sus miserias y complejos— y esa imagen pública inmaculada. No nos podemos imaginar, el daño que le infligimos con esa admiración. Todos conocemos el triunvirato sex & drugs & rock’n roll. La vida llevada al exceso, que tan asociada está a los artistas, no es sino una forma de escapar a esa insoportable separación entre lo que uno sabe y lo que el resto quiere ver.

Hoy les dejo con una imagen de la actuación de Mambo Jambo, el grupo de Dani Nel·lo que creaba el hilo musical de la noche “Taboo” en la Sala Apolo. Me encanta el contrabajista. Parece recién sacado de Reservoir Dogs. Me pasé toda la actuación buscando la oreja por el escenario (estúpida broma que entenderán los que hayan visto la película).

Buenos días.

2 comments:

SUE said...

Grande "Control" y sus bondades varias pero grandes, enormes Los señores Rosa, azul, naranja,blanco, marrón y rubio.

Buena foto, si se me permite!

Liar Nymphet said...

A mí me encanta la mediocridad de vivir en la oscuridad. Pero es verdad que siento súmamente atractivos los flashes de las fotos que, malditos ellos, engañan y te hacen creer que todo es súmamente fácil.
Soy mitómana e Ian Curtis uno de mis dioses.
¿Ves? Otro flash acaba de invadir mi habitación