12.3.09

CONFRONTACIÓN


La abundancia de información tiene estas cosas. Los políticos hablan tanto y en tantos medios que muchas de sus afirmaciones pueden quedar anegadas bajo el cúmulo de datos. Concretamente, este fin de semana un ministro de nuestro Gobierno aparentemente progresista era entrevistado y soltaba lindezas como la presente:

Somos tan capaces de todo como ellas. Podría rematarlo diciendo “incluso más”, pero me quedaré ahí”.

¿Ofensivo, vergonzante, retrogrado, machista? Pueden aplicar el epíteto que consideren, todos serían adecuados.

La cuestión es que esas palabras no las profirió un ministro, sino una ministra, concretamente Carme Chacón, por supuesto, cambiando los sexos de la sentencia. Pero el argumento de fondo es el mismo. Ellas contra ellos o ellos contra ellas. La sempiterna guerra de sexos. Reproduzco a continuación la frase:

¿Qué mensaje dirigiría a las mujeres de este país?
Un mensaje muy sencillo: somos tan capaces de todo como ellos. Podría rematarlo diciendo "incluso más", pero me quedaré ahí.

(Suplemento de La Vanguardia, domingo 8 de marzo)

En boca de una mujer, lo que antes podía parecer retrógrado será ahora visto como políticamente correcto, y hasta provocará una sonrisa, cuando, a mi parecer, es igual de falaz y hurta de lleno el fondo del problema. Y lo hace por un puñado de votos, como suele pasar en los políticos.

¿Y cuál es el tema de fondo? La igualdad de oportunidades. ¿Se da efectivamente en nuestro país? Evidentemente no. ¿Las mujeres tienen más dificultades para que se valoren sus méritos profesionales y trabajar en las mismas condiciones que los hombres? Evidentemente sí. ¿Es injusto? Por supuesto, vamos, son verdades innegables. Pues lo que debemos hacer es luchar contra esa situación y no perder el tiempo con estupideces como buscar diferencias para saber qué sexo es más capaz, inteligente, sensible o creativo, así en general. Y eso es una idiotez porque, en ambos sexos, hay gente capaz e ineptos, inteligentes y retrasados, sensibles y plantas, creativos o nulidades.

Basta ya de confrontar sexos. Valoremos a una persona por lo que es y no por lo que tiene bajo sus faldas o pantalones.

En la imagen de hoy, otra suerte de mêlée, de la que, como supondrán, me muestro bastante más partidario. Invasión de escenario por parte de mujeres en el concierto de Mujeres, conjunto curiosamente formado sólo por hombres.

Buenos días.

3 comments:

Tomás said...

Bien cierto. De la asepsia del lenguaje que fulmina toda connotación de inferioridad (de la tercera edad, empleadas del hogar..)hemos pasado a una discriminación positiva y seductora que pasa una mano de pintura sobre fachadas igual de agrietadas. ¿Estaría pensando Chacón en Anne Igartiburu?

¿Sisters of Mercy hoy?

Saludos.

Óscar García said...

¡Jaja! Cuánta razón tienes. Y que sigas conservando esa sabia ironía de tu texto.

Cambiando de tercio, no, no voy a Sisters. Me da que hasta la próxima semana no cubriré nada.

¡Saludos!

Keka Suárez said...

Hoxe tocaches un tema peliagudo según quen che lea, non teño moito que dicir, eu non entendo nin de política, nin de fanfarronería.

Desnde logo que se che gosta ler en galego, oe¡¡¡ que por min non sexa eh¡¡¡. Un saudo e que teña Boa Tarde.