22.9.09

EL MUNDO A SUS PIES


En la imagen, Julia Kent, su chelo y el sampleador con el que crea sus capas de sonido. Es curioso porque la imagen me remite, por esas extrañas asociaciones que realiza el cerebro, a la película “El hombre que pudo reinar”, de John Huston. Dichas asociaciones se dan a raíz de los conceptos “el mundo a sus pies” y “capas”. Me intentaré explicar.

La película de Huston narra como dos buscavidas ingleses llegan, por avatares de la vida, al poder absoluto en un remoto país. Uno de los dos protagonistas, interpretado por Sean Connery, pierde el sentido de la realidad y se cree omnímodo, lo que propicia su caída en desgracia. La historia pues explica eso de “el mundo a sus pies”.

Por otro lado, las capas de sonido que crea la Kent utilizando repetidamente su sampleador pueden asemejarse a las capas de significación que tiene la película de Huston. Me volveré a explicar. Es una película de aventuras pero no lo que ahora entendemos por “película de aventuras”. Al igual que la grandiosa “Moonfleet”, de Fritz Lang, la obra de Huston ofrece diferentes sustratos, significados diversos en función de cuánto queramos profundizar. Divierte a un niño cuando la ve pero, con la aparente frivolidad de sus aventuras, transmite un conocimiento de la psique humana que ya querrían muchas películas aparentemente serias. A años luz de indianas jones y similares. Hace muchos años escribí un estudio sobre la película en la desaparecida revista de cine “Seqüències”. Estoy seguro de que si ahora revisase mis comentarios me pondría las manos a la cabeza por su superficialidad. Por el contrario “El hombre que pudo reinar” resplandece inmarchitable con el brillo del arte con mayúsculas.

Buenos días.

3 comments:

Tomás said...

Huston, el oro en polvo extraviándose en la llanura, al igual que los sueños propulsados por la codicia de los infelices. Fatalidad, es la palabra.

Subir al escenario descalza se ha convertido en un ritual femenino muy en boga. Una liturgia que pretende espiritualidad. Lizz Wright, Sara Lenka, Eliane Elias...

Óscar García said...

Jaja! si me permite la maldad, Julio Iglesias fue uno de los pioneros en igualar pies descalzos a sinceridad sin artificios.

A él le han seguido otros apóstoles de la sinceridad como Pau Donés o Bisbal, así que no es una liturgia estrictamente femenina. En el caso de la Kent la perdono porque sí que utiliza los pies para su interpretación.

SUE said...

Caramba como has seguido al vástago del bronceado hombre de un sólo perfíl!!

No sabía yo eso...

:)

Bonita foto...bonitos los pies descalzos...

Uno grande!